domingo, 24 de agosto de 2014

RESEÑA: TEMBLOR, DE MAGGIE STIEFVATER

 ¡Hola, mortales!
 Con este libro tengo historia (y no me refiero precisamente a la que hay entre sus páginas) *ba dum tss* Es distinto. ¿Os ha pasado alguna vez que habéis cogido un libro y habéis conectado con él inmediatamente? Eso me paso con Temblor. No se me ocurre otra forma de describirlo más que diciendo que "es mi Dolor Imperial".

Título: Temblor (Los lobos de Mercy Falls #1)

Título original: Shiver (The Wolves of Mercy Falls #1)

Autora: Maggie Stiefvater

Páginas: 429

Editorial: SM


SINOPSIS
 Cuando el amor
te hace temblar en otoño,
es mejor que el invierno
no llegue nunca: las primeras nevadas pueden arrebatarte a quien más deseas.
 Hace años,
 Grace estuvo a punto de morir
devorada por una manada de lobos.
Inexplicablemente, uno de ellos,
un lobo de intensos ojos amarillos, la salvó.
 Desde entonces, todos los inviernos
Grace se asoma al bosque
y, desde la distancia,
lobo y chica se observan.
Cuando llega el calo, la manada desaparece
y, con ella, "su" lobo.
 Pero este año,
Grace deseará que el invierno no llegue
y que el otoño dure para siempre.
 Ha conocido a un chico; se llama Sam.
 Es un tipo normal, salvo por sus ojos.
 Son de un extraño color amarillo.

OPINIÓN PERSONAL

Me recuerdo tendida en la nieve, un diminuto y cálido bulto rojo enfriándose en medio de un corro de lobos. Apiñados a mi alrededor, me lamían, me mordían, jugueteaban conmigo. Sus cuerpos amontonados bloqueaban el escaso calor del sol. El hielo les centelleaba en los cuellos, y sus alientos creaban sombras opacas que flotaban en el aire. El aroma almizclado de sus pieles me hacía pensar en perros mojados y hojas quemándose, y me resultaba agradable y aterrador a un tiempo. Sus lenguas dejaban un rastro cálido sobre mi pie; sus bruscos dientes me rasgaban las mangas y se me enganchaban en el cabello; me hurgaban en las clavículas y el cuello, queriendo sentir mi pulso. 
 Así empieza Temblor, con el ataque de los lobos a Grace cuando era pequeña.
 Para empezar esta reseña debo destacar un punto importante que deberéis tener en cuenta si pensáis leer el libro: si lo que buscáis es una historia con acción y rebosante de misterio... no pongáis toda vuestra fe en este libro. Temblor no es así. Si lo que buscáis es, en cambio, una historia de amor sin fronteras, una historia en la que la fuerza de voluntad pueda con el instinto más primitivo... entonces debéis de leer Temblor.
 Cuando alguien lee acerca de este libro (ya sea alguna reseña, resumen o la misma sinopsis del libro) siempre suele pensar "Oh, vaya, como Crepúsculo", de hecho, no sabéis la de veces que me he encontrado resumiéndole un poco el libro a alguien y que este alguien me haya dicho: "Bah, es como Crepúsculo, paso". ¡Error! Temblor no es como Crepusculo al igual que Percy Jackson no es como Harry Potter solo porque tengan algún esquema en común. Para esto debo comenzar con la reseña.
 Comencemos situándonos en el lugar. Mercy Falls, Minnesota, es un pueblo pequeño, el típico pueblo del que todo el mundo querría escapar. Todos menos Grace Brisbane, quien siente que su lugar está allí, en su acogedora casa situada casi en las lindes del bosque de Boundary, donde hace años fue atacada por los lobos... y salvada por uno mismo.
 Los lobos de Boundary no son solo lobos, sino que son licántropos. Pero he aquí unos licántropos totalmente distintos a como nos los han pintado hasta ahora. Estos no se transforman con la luna llena, no les afectan las balas de plata ni pisar suelo sagrado. Maggie Stiefvater ha creado unos licántropos que se ven afectados al frío, de forma que durante las épocas de frío estos se mantienen en su forma lobuna; al llegar el calor vuelven a su estado humano. Pero conforme los años van pasando, las transformaciones a humanos van cesando hasta que llega un punto en el que paran definitivamente. Entonces permanecen en su forma lobuna... se convierten en lobos y ya nunca vuelven a ser humanos. Para ellos es inevitable, es como... un virus. Es terminal.
 Como protagonistas tenemos a Sam y a Grace.
 Grace Brisbane, responsable y estudiosa, es casi como si viviese sola en su casa. Sus padres no le hacen prácticamente caso y, para ella, son más como compañeros de piso que padres. Desde el ataque de los lobos, Grace se pasa los inviernos mirando por la ventana de la cocina a aquel lobo de ojos amarillos que, enfrentándose a toda la manada, la salvó. Cuál es la sorpresa de Grace un día cuando se entera de que darán caza a los lobos del bosque y ella va corriendo a su casa y se encuentra con un muchacho tumbado en el porche del jardín trasero, desnudo y desangrándose con un tiro en el cuello. El muchacho la mira. Sí, sin duda esos eran los ojos de su lobo. 
 Sam Roth. Cuando un licántropo se transforma, olvida todo lo que respecta a su vida como humano y lo único que permanecen son sus ojos. Desde el primer momento nos queda claro el vínculo que existe entre Sam y Grace, el amor que se procesan... pero, ¿será posible permanecer juntos? Este verano, Sam no se ha transformado en humano y, cuando por fin esta transformación se lleva a cabo gracias al tiro del cazador, es otoño. Si no fuera por el disparo... ¿habría llegado Sam a transformarse? Todo indica al mismo sitio: este es su último año. Conocer a Grace en estas circunstancias parecía una broma cruel. Hay muchas formas de describir a Sam, pero creo que la palabra más acertada sería fuerte. Él lo único que quiere es ser él, ser Sam, ser humano, no quiere olvidar cada vez que se transforma, pero la lucha por conservarse a sí mismo es cada vez más difícil. Sin embargo él está dispuesto a hacer lo que sea con tal de permanecer al lado de Grace.
La dulzura del verano en su piel, la cadencia casi familiar de su voz, la sensación de sus caricias. Todo mi cuerpo cantaba con el solo recuerdo de su proximidad.
 Estábamos demasiado cerca.
  Y yo no podía apartarme.
 También tenemos a Isabel Culpeper, la hermana de un chaval que fue atacado por los lobos del bosque. Isabel es... frívola, sarcástica y cruel, pero es a la vez un personaje que tomará un importante papel en la historia llegando casi a ser un punto clave en los últimos capítulos.

 La pluma de Maggie Stiefvater es ligera, pausada, es casi como saborease cada frase al escribirla. Narrando algunos capítulos Sam y otros Grace, Maggie consigue engancharnos a la historia mostrándonos ambos mundos, el humano, el Mercy Falls de Grace; y el de los lobos, aquel en el que la naturaleza rige sus propias reglas y donde el instinto predomina sobre todas las emociones, las dolorosas transformaciones, los desgarradores recuerdos de la infancia de Sam, sus miedos y sus dudas. Capítulos cortos que hacen que el libro mantenga un ritmo constante y ameno. Debería destacar también el final. Unos últimos capítulos en los que todo parece llenarse de emoción y tensión, con un final maravilloso y bastante cerrado que sin duda dejará conforme a más de uno.
 Tal vez si tuviera que ponerle una pega al libro sería algún momento cursi que pueda una encontrarse por ahí, pero salvo eso, ha sido algo que he disfrutado muchísimo.

 En definitiva, Temblor es un libro ameno y de lectura rápida, con unos personajes fuertes pero también sensibles y con un ritmo constante. Una historia preciosa en la que el mensaje de luchar por lo que quieres queda grabado desde el principio, una historia que parece acariciar todas sus páginas con el mensaje de amor de estos dos jóvenes. Con unos últimos capítulos llenos de emoción y un final perfecto a mi modo de ver, Temblor es un libro que recomiendo leer sin ninguna duda.

 Me quedé quieto. Estaba allí mismo, casi a su alcance y, al mismo tiempo, a mil kilómetros de distancia.  


5/5
Eso ha sido todo, mortales


Excelsior
R



viernes, 22 de agosto de 2014

RESEÑA: CAZADORES DE SOMBRAS, LOS ORÍGENES #1, DE CASSANDRA CLARE

¡Hola, mortales!
 ¿Se me echaba de menos? *jaja, buen chiste, R, jaja*
 La reseña que traigo hoy es de un libro que tenía ganas de leer desde hace ya bastante tiempo... pero que no me atrevía a empezarlo porque, la verdad, tenía unas expectativas bastante altas respecto a él y me daba... pánico... llevarme una decepción. No diré más, he aquí la reseña de Cazadores de Sombras, los Orígenes: Ángel mecánico.

Título: Cazadores de Sombras, los orígenes #1: Ángel mecánico

Título original: The Infernal Devices #1: Clockwork Angel

Autora: Cassandra Clare

Páginas: 443

Editorial: Destino


SINOPSIS
Tessa Gray está dispuesta a encontrar a su hermano. Para ello, se dirige a Londres, donde será raptada por una organización llamada el Club Pandemonium, y rescatada por los Cazadores de Sombras. Pronto, Tessa verá su corazón dividido entre Jem, cuya frágil belleza oculta un oscuro secreto, y Will, cuya hiriente ironía y cambios de humor constantes la mantienen a distancia, mientras los tres intentan salvar... el mundo.
La magia es peligrosa,
pero el amor lo es todavía más. 


OPINIÓN PERSONAL

El demonio explotó salpicando ícor y entrañas.

 Lo sé, no dice mucho, pero mi norma es poner tan solo el primer párrafo y si el primer párrafo es tan solo una frase o incluso un nombre... pues pondré una frase o incluso un nombre. 
 Tengo que admitir que, cuando lo comencé a leer no me resultó gran cosa y aun habiendo llegado al capítulo tres no conseguí engancharme. Pensaba que había cometido un tremendo error al comprar el libro.
 ¿Y qué pasó? Que me tocó tragarme mis palabras.

 No he leído Cazadores de Sombras por el simple hecho de que, a ver, son SEIS LIBROS. Eso no hacía más que echarme para atrás cada vez que veía Ciudad de Hueso en una librería y pensaba en comenzar la saga. Tampoco ayudaba que, pasara por donde pasase, me encontraba gente diciendo que era una saga increíble, que era maravillosa, lo mejor que habían leído en su vida... y todo eso. He ahí otro dato sobre mí: cuanto más oiga hablar de lo maravilloso que es un libro o una saga, cuantas más veces me recomiendes que me la lea, cuantos más aspavientos haga la sociedad con ese libro o saga... menos ganas voy a tener de leer esos libros. Así soy yo, revelándome contra la sociedad desde tiempos inmemoriales
 Hablemos de Ángel Mecánico.
 Lo primero que tengo que decir del libro es que me parece que la sinopsis no le hace justicia para nada. Alguien que (como yo) no haya leído Cazadores de Sombras y, por tanto, no sepa cómo es la pluma de Cassandra Clare ni su estilo, se pensaría que lo que predomina en este libro es el romance. Y, al menos yo, no lo he visto así.
 Lo que yo he visto en Ángel Mecánico es una historia sobre una muchacha fuerte y decidida con un don excepcional que hará lo que sea con tal de encontrar a su hermano. He visto luchas contra autómatas, personajes que me han sacado de quicio y otros con los que he disfrutado sobremanera; he visto diálogos divertidos y situaciones de lo más extrañas; luchas, vampiros, gente prendiéndose fuego y un hombre que desconfía de los patos. Ha habido romance, por supuesto, pero no constantemente, no en dosis extremas ni escenas cursis. Creo que Cassie Clare ha sabido controlarlo todo a la perfección, dándonos lo justo de aquellos que necesitábamos pero que de alguna forma nos ha resultado demasiado poco. Para mí es importante saber controlar eso; es mi teoría de las galletas de chocolate: tu madre siempre te dará la cantidad justa de galletas de chocolate para que no te de un empacho, pero tu siempre querrás más, claro que no puedes comer todas las que quieras porque entonces te sentarán mal y dejarán de saberte tan bien. Damas y caballeros, he aquí la teoría de las galletas de chocolate *llueven los aplausos y la ovaciones, caen pétalos de rosas reales y literales por todo el lugar mientras me acerco a recoger mi premio Nobel y la gente llora de emoción ante mi sabiduría* Okay, volvamos a la reseña.
 ¿Quién no conoce, al menos un poco, el mundo de los Cazadores de Sombras? También llamados Nefilim por ser descendientes del arcángel Raziel, los Cazadores de Sombras se dedican a ir por el mundo matando demonios que osen irrumpir la tranquila vida de los mortales, o mundanos, y amenazando con ellos el equilibrio entre el mundo de los Cazadores  y el de los mundanos. Por dicho..."trabajo" de ir por ahí luchando contra demonios, las vida de los Cazadores de Sombras suele ser bastante breve. Yo misma no sé mucho acerca de esto porque este es el primer libro que leo así que no soy la más indicada para dar una clase exhaustiva sobre esto. Para más información consulten el Códice del Cazador de Sombras. Pasemos a otro punto.
Los personajes.
 Tenemos como protagonista a Tessa Gray, una chica con un don sumamente extraño incluso en el mundo de los Cazadores de Sombras. Tessa es... fuerte. Me gusto muchísimo su preocupación por encontrar a su hermano y su aguante para todo lo que se le viene encima (también me gustó que le gustase leer, pero eso es un punto aparte). Pero llegó un momento, ya por el final del libro, que Tessa terminó por... digamos, no caerme tan bien como al principio. Me explico: está Will y está Jem, y está el hecho de que tal vez Tessa se piensa que puede conseguir que el "chico malo" se convierta en "el chico bueno y sensible" que hay en los libros y que lo suyo pueda ser un final feliz, un bonito "y vivieron felices". Y a mi, sinceramente, no me gustó para nada esa faceta de niña cursi y romántica de Tessa. Por alguna razón que no llego a comprender todavía... ese comportamiento me resulta completamente ajeno a ella.
 Terminando con Tessa, pasemos William Herondale. Will, el chico sarcástico y con cambios de humor que, evidentemente, tenía que cautivar a la chica por muy pedante que fuese. Pero como soy una hipócrita, tengo que admitir que el personaje me ha gustado bastante, tal vez no tanto como me han podido llegar a gustar los "chicos malos" de otros libros, pero ha sido soportable. Lo que me gustaba de Will era más que nada su toque de humor que a menudo (casi siempre) resultaba un tanto ofensivo. Pero claro, en este tipo de personajes queda bien.
- ¿Sueles meterte en las alcobas de los caballeros en mitad de la noche?- dijo Will-. Si lo hubiera sabido, me habría esforzado más para que Charlotte dejara que te quedaras. 
- No veo por qué lo que yo haga puede ser de tu incumbencia- replicó Tessa-. Sobre todo desde que me abandonaste en medio del pasillo y me dejaste sola para que encontrara el camino de regreso a mi dormitorio. 
- ¿Y en vez de eso encontraste el camino al dormitorio de Jem? 
 Luego tenemos a Jem Carstairs, que vendría a ser el muchacho bueno y atento con el que a la chica siempre le convendría estar pero que, por algún motivo que a día de hoy los lectores aún desconocemos, pocas veces se fija en él. Jem es un personaje al que le he cogido más cariño que a los demás, tanto por su simpatía como por el secreto que oculta sobre su pasado y que tiene mucho que ver con su extraña (aunque cautivadora) belleza. Porque a ver, no sé a vosotros, pero a mí un chico de ojos y pelo plateado me llama MUCHO la atención.
 Tenemos otros personajes, como es Charlotte, la mujer que está a cargo del Instituto y que también se lleva muchísimo mérito por su coraje y su fuerte personalidad que han conseguido dejarme completamente encantada en todas las ocasiones en las que hacía acto de presencia.

 Visto así todo tiene pinta de ser el típico triángulo amoroso con el chico malo, el chico bueno y la chica indecisa que se enamora por primera vez. Pero ya os lo he dicho: si bien, a mi parecer, la historia de amor puede resultar bastante predecible, lo que nos encontramos entre las páginas del libro es algo más. No se ve casi indicio de romanticismo sino hasta la mitad o un poco más allá. Lo que aquí predomina es la incógnita del hermano de Tessa y de quiénes eran en realidad aquellos que la secuestraron para aprovecharse de su don.
 Llegando ya al final del libro todo toma un giro inesperado que consigue mantenerte anclado hasta el final, llegando a veces dejarte bastante perplejo ante los sucesos que se dan a cabo.
 Y debo destacar el final. Dioses, qué final. Estás leyendo todo el libro pensando que es predecible, que todo se desarrollará de una forma bastante fácil de prever... pero no. Al acabar el último capítulo, me quedé con más preguntas que número de respuestas que me habían dado. Sin duda me llevé una grata sorpresa con este libro.

 En definitiva, Ángel Mecánico es un libro sorprendente con una trama que consigue engancharte, aunque no inmediatamente, y que al final acaba dejándote con ganas de comenzar el siguiente libro para encontrar las respuestas a las incógnitas que deja este. Pese a no llegar a profundizar del todo con los personajes, sí que he disfrutado mucho con la lectura, rápida y constante, llena de acción y de la dosis justa de romance para no quedar empachados. Cassandra Clare ha traído una historia que sin duda ha sabido llevar a la perfección.

Estoy deseando empezar con Príncipe Mecánico.

- Siempre hay que tener cuidado con los libros- replicó Tessa-, y con lo que contienen, porque las palabras tienen el poder de cambiarnos.






4/5
Eso ha sido todo, mundanos.

Nunca os fiéis de un pato...


Excelsior
R



sábado, 2 de agosto de 2014

RESEÑA: EL CORREDOR DEL LABERINTO, JAMES DASHNER

Hola, mortales.
 Hoy vengo con una nueva reseña que tendría que haber hecho hace tiempo, pero que he preferido esperar a tener una idea clara acerca de lo que pienso sobre este libro. Y es que, pese a que me ha gustado, no ha llegado a cautivarme tanto como pensé que lo haría porque son más las cosas que no he encontrado de mi agrado que las que sí he encontrado. Pero estoy perdiendo el tiempo. Aquí tenéis mi (extensa hasta la saciedad) reseña sobre El Corredor del Laberinto, pingajos.

Título: El Corredor del Laberinto

Título original: The Maze Runner

Autor: James Dashner

Páginas: 524

Editorial: Nocturna Ediciones



SINOPSIS
MEMORIZA. CORRE.
SOBREVIVE.
«Bienvenido al Claro. Verás que una vez a la semana, siempre el mismo día y a la misma hora, nos llegan víveres. Una vez al mes, siempre el mismo día y a la misma hora, aparece un nuevo chico, como tú. Siempre un chico. Como ves, este lugar está cercado por muros de piedra… Has de saber que estos muros se abren por la mañana y se cierran por la noche, siempre a la hora exacta. Al otro lado se encuentra el laberinto. De noche, las puertas se cierran… y, si quieres sobrevivir, no debes estar allí para entonces.»
 Todo sigue un orden… y, sin embargo, al día siguiente suena una alarma. Significa que ha llegado alguien más. Para asombro de todos, es una chica.
 Su llegada vendrá acompañada de un mensaje que cambiará las reglas del juego.

OPINIÓN PERSONAL
 Empezó su nueva vida de pie., rodeado de fría oscuridad y aire viciado y polvoriento.

 Ese es el comienzo de El corredor del Laberinto. Había oído maravillas de este libro. Maravillas. Así que cuando lo cogí, lo hice con ganas y esperando encontrar entre sus páginas una historia digna, que me mantuviera en tensión y suspense, y que me dejase con ganas de más.

 Podría decirse que fallé estrepitosamente.

 Mis… sentimientos hacia El corredor del Laberinto han sido más bien algo contradictorios y, dado que esto es una reseña, supongo que deberé explicar mis puntos.

 Cada mes llega al Claro un chico nuevo. Siempre un chico. Todos llegan en las mismas condiciones: en una especie de ascensor, sin recordar nada de su vida salvo su nombre. ¿Sus padres? ¿Dónde vivía? ¿Su fecha de nacimiento? Espacios en blanco. Para los chicos que llegan al Claro poco importa ya lo que haya sido su vida pasada, ahora tienen un nuevo objetivo: salir de allí. Y la única forma de salir es resolver el Laberinto. Los débiles no sobreviven.

 En primer lugar, el libro me ha gustado por la ambientación que tiene, no por las descripciones (que me han parecido un poco escasas en algunos momentos y demasiado abundantes en otros). Me ha encantado toda esa pequeña sociedad que se han montado en el Claro, con sus normas y todo su afán por mantener el orden. Prácticamente son un grupo de adolescentes que se han sabido mantener a flote ellos solos y se han conseguido organizar muy bien para seguir adelante. Cada uno tiene una función y ninguno está por estar. Las escenas dentro del Laberinto también las he disfrutado bastante ya que han estado cargadas de tensión y peligro. Porque, en efecto, este no es un laberinto cualquiera: sus paredes parecen moverse cada noche y, por tanto, cada mañana nos encontramos con unos pasillos nuevos. Y luego están los laceradores, esos bichos mezclas de animal y máquina que, si bien no matan, sí que pican. Una picadura que hace que uno recuerde cosas de su vida pasada pero que, sin embargo, luego se verá incapaz de contar, llegando a rozar la locura ante la nueva información. Otra cosa que he disfrutado ha sido la jerga que se traían los clarianos, esas palabras nuevas que a menudo usaban a modo de insulto o broma y que me ha sorprendido la facilidad con la que me he acostumbrado a ellas.

Lamentablemente he de admitir que hay más cosas que no me han gustado que las que sí me han gustado.

 No me ha gustado la parte esa del misterio. El libro sigue la historia de Thomas, otro chico más que llega al Claro sin saber absolutamente nada y sin recuerdos de su vida pasada, pero que, sin embargo, lo persigue un extraño sentimiento de familiaridad… como si ya hubiese estado allí antes pero que, claro está, no lo recuerda. Hasta ahí bien, me dije, algo de misterio, ¿a quién no le gusta el misterio? Pero llegó un punto en el que… digamos que aborrecí completamente el misterio que tanto había ansiado. Me exasperaban los pensamientos de Thomas, que parecía que no hacía más que repetirse diciendo que no recordaba nada pero que todo le resultaba familiar. ¡Eso ya me quedó claro al principio! No era necesario volver a decirlo... y volver a decirlo, y volver a decirlo, y volver a decirlo. Todo es muy confuso al principio y el lector se ve tan aturdido como el protagonista, con sus dudas y sus preguntas sobre qué es todo eso y qué es lo que está pasando. Sin embargo, a menudo uno tiene la sensación de que Thomas da vueltas y más vueltas entorno a una teoría que el lector ya conseguido sacar.

 Otra cosa que no me ha gustado han sido los personajes. Me han parecido un tanto fríos, distantes y, en algunos casos, explosivos y... ¿violentos? Vale, sí, están encerrados en un laberinto y no pueden salir, no recuerdan nada y están atrapados en el Claro… pero, ¡por los dioses! No he llegado a cogerle cariño a nadie. Ninguno me ha llegado a parecer del todo… humano. Me faltaban sentimientos y pensamientos que me indicasen que ellos eran personas de verdad con sentimientos de verdad y preocupaciones de verdad, que eran conscientes de la situación que les rodeaba. El único personaje que ha llegado a gustarme de verdad ha sido Newt, el segundo al mando, él me ha parecido el más humano al preocuparse por la vida de sus compañeros del Claro, valiente pero sin llegar a ser insoportable. El no saber nada del resto de los personajes secundarios cuando el libro está narrado en tercera persona, me ha parecido un punto negativo. James Dashner se centra en Thomas y casi olvida que hay otras personas a su alrededor.

Thomas. Thomas, Thomas, Thomas. Tengo mucho que decir de él, pero también es poco lo que tengo que decir ya que todo puede resumirse en una sola palabra. Exasperante. He leído un montón de opiniones sobre Thomas y todas ellas coincidían en que era un personaje atento y valiente que se preocupaba por salvar la vida de los demás y solo quería ayudar. Yo siento admitir que no he visto eso o, al menos, no de forma tan acentuada como los demás. Vale, sí, es valiente, pero, ¡por el amor de Zeus! En algunos momentos esa valentía se convertía en estupidez e insensatez. A mi modo de ver, Thomas se preocupaba más de resolver su misterio que en ayudar a los clarianos. Quería salir del laberinto, quería ayudar a resolverlo… pero solo porque quería vengarse de aquellos que lo enviaron allí, en ningún momento se le ha ocurrido pensar que el resto de jóvenes que lo rodeaban también tenían una vida que habían perdido al ser encerrados en el Claro. Aprecio los actos de valentía, por supuesto que los aprecio, pero solo si son completamente desinteresados y vienen acompañados de un personaje que se piensa dos veces las cosas o que, al menos, los hace consiente de lo que está arriesgando. Los “actos de valentía” de Thomas no me han parecido auténticos, más que nada porque el chaval no tenía pinta de haberlos planteados seriamente y, por ende, me daba la sensación de que lo único que quería era hacerse el héroe.

 No tengo nada que decir de la chica porque, de hecho, no sé nada sobre ella aún y no se le da el protagonismo que merece por el hecho que Thomas parece eclipsarlo todo. Puede intuirse también una historia de amor, pero que en este libro no estará presente.

 No debería alargar más esto.

 En definitiva. El corredor del laberinto es un libro con una buena trama de la que el autor podría haber sacado más provecho pero que, al final, no ha sabido exprimirla al máximo. Con una buena ambientación y un lenguaje completamente nuevo para nosotros, pero con unos personajes que no llegan a calar hondo y un protagonista que me ha parecido como mínimo, exasperante. De lectura rápida pero no plenamente satisfactoria y con un final que te deja algo intrigado. Tal vez predecible en algunos momentos.

 Sinceramente, tengo intención de terminar la trilogía… pero no de momento, he tenido suficiente Thomas por un tiempo.
"Si no estuvieras asustado, no serías humano."

3/5
Nos vemos, pingajos,
Excelsior
R